Cuando me preguntan si en realidad voto y por qué lo hago, siempre recuerdo una frase que a más de alguien le sonará izquierdosa-mala clase. Pero la justificación viene de una cuña que leí y que rezaba que “votar es lo mínimo que se puede hacer, que muchos chilenos murieron sin tener ni voz ni voto…”. Es cosa de pensar un poquito no más y darse con una piedra en los dientes.
Un asunto aparte es que las opciones que se te entreguen en el voto no te representen. Siempre está la opcion de anularlo, tal como te lo gritan las paredes, la opción de rayar y evitar un “mal mayor” o “votar para anular el voto de…”. Sin embargo, independiente de la posición que elijas, es dentro de la urna, cuando eres sólo tú y el papelito, el momento en que se conjuga ese concepto extraño, prácticamente imperceptible que se SUPONE es la democracia.
Ahora, el problema viene siendo eso de la representación de la sociedad. Pero, con la mano en el corazón, ¿te identificas con la clase política?. Izquierda, derecha, centro, no importa porque cada año mejoran en hablar distinto a quienes “representan”. Como un Adolfo Zaldívar o un Larraín, ¿me entienden?
Ahora que las elecciones municipales se avecinan y comienzan poco a poco a llenar las páginas de los diarios y los minutos en los noticiarios, traigo a colación dos noticias que me quedaron dando vueltas. La primera es una entrevista aparecida en La Nación Domingo de su última edición. En entrevista con el ex Intendente de la Región Metropolitana, Marcelo Trivelli, el periodista Boris Bezama le pregunta: “…ustede reconoce que la DC no tiene ganado el derecho a llevar candidato presidencial? Sí, responde Trivelli, con la misma fuerza manifiesto que los cupos, los cargos y las candidaturas no son de los partidos ni de los candidatos, sino de la ciudadanía” (La Nación Domingo, domingo 25 de febrero de 2007).
En una posición totalmente opuesta, la segunda noticia pertenece al queridísimo Diario El Día y trata de los nombres que suenan para la alcaldía de La Serena, considerada por esa publicación como “emblemática” (de qué, no lo dice). Respecto a una posible reelección del actual alcalde socialista Raúl Saldívar, el edil reconoce que “por más que en la región o en la comuna aspiremos a un tipo de negocación (por decidir quién será el candidato) con los partidos aliados, la determinación va a ser dirimida por el nivel central”. (Diario El Día, juves 1 de marzo de 2007). Yo supongo que no formo parte de ese nivel central.
Un asunto aparte es que las opciones que se te entreguen en el voto no te representen. Siempre está la opcion de anularlo, tal como te lo gritan las paredes, la opción de rayar y evitar un “mal mayor” o “votar para anular el voto de…”. Sin embargo, independiente de la posición que elijas, es dentro de la urna, cuando eres sólo tú y el papelito, el momento en que se conjuga ese concepto extraño, prácticamente imperceptible que se SUPONE es la democracia.
Ahora, el problema viene siendo eso de la representación de la sociedad. Pero, con la mano en el corazón, ¿te identificas con la clase política?. Izquierda, derecha, centro, no importa porque cada año mejoran en hablar distinto a quienes “representan”. Como un Adolfo Zaldívar o un Larraín, ¿me entienden?
Ahora que las elecciones municipales se avecinan y comienzan poco a poco a llenar las páginas de los diarios y los minutos en los noticiarios, traigo a colación dos noticias que me quedaron dando vueltas. La primera es una entrevista aparecida en La Nación Domingo de su última edición. En entrevista con el ex Intendente de la Región Metropolitana, Marcelo Trivelli, el periodista Boris Bezama le pregunta: “…ustede reconoce que la DC no tiene ganado el derecho a llevar candidato presidencial? Sí, responde Trivelli, con la misma fuerza manifiesto que los cupos, los cargos y las candidaturas no son de los partidos ni de los candidatos, sino de la ciudadanía” (La Nación Domingo, domingo 25 de febrero de 2007).
En una posición totalmente opuesta, la segunda noticia pertenece al queridísimo Diario El Día y trata de los nombres que suenan para la alcaldía de La Serena, considerada por esa publicación como “emblemática” (de qué, no lo dice). Respecto a una posible reelección del actual alcalde socialista Raúl Saldívar, el edil reconoce que “por más que en la región o en la comuna aspiremos a un tipo de negocación (por decidir quién será el candidato) con los partidos aliados, la determinación va a ser dirimida por el nivel central”. (Diario El Día, juves 1 de marzo de 2007). Yo supongo que no formo parte de ese nivel central.